Hola, soy João Barros, psicoanalista y escritor, y estoy aquí para explorar contigo uno de los temas más fascinantes de psicoanálisis: la idea de que, más allá del principio de placer, hay una fuerza que nos lleva a buscar lo contrario, la repetición y la muerte, finalmente. Esto puede parecer oscuro, pero es un concepto fundamental comprendernos mejor a nosotros mismos y a nuestros comportamientos.
Introducción al principio de placer
Antes de sumergirse en las aguas más oscuras del psicoanálisis, comencemos con lo básico. El principio de placer es una idea central en la teoría de Sigmund Freud, lo que sugiere que los seres humanos están motivados para buscar placer y evitar el dolor. Eso parece lógico, ¿no? ¿A quién no le gusta sentirse bien y evitar situaciones desagradables?
Sin embargo, la vida real nos da muchas situaciones en las que las personas parecen actuar en contra de sus propios intereses, buscando dolor o repeticiones patrones que claramente no son beneficiosas. Aquí es donde entra la idea de “más allá del principio del placer”, un concepto que Freud exploró en su trabajo de 1920.
El impulso de la muerte
Una de las principales contribuciones de “Beyond the Pleasure Principle” es la introducción del impulso de la muerte, o “Todestieb” en alemán. Esta fuerza se ve como una tendencia innata en los seres vivos a regresar a un estado de inorganicidad, es decir, hasta la muerte. Esto puede parecer un poco extraño, pero piense en ello: a menudo nuestros comportamientos autoestructivos o repetitivos pueden verse como una forma de buscar una especie de “muerte” simbólica, un escape de la tensión y el estrés de la vida.
Este impulso no se trata necesariamente de querer morir, sino más bien una búsqueda de un estado de calma, paz, que a menudo se confunde con la idea de la muerte. Es como si, en nuestros tiempos más difíciles, una parte de nosotros anhelara el fin del dolor y el sufrimiento, incluso si eso significa el final de la vida en sí.
Repetición compulsiva
Otro concepto crucial en “Beyond the Pleasure Principle” es la repetición compulsiva. ¿Has notado cómo las personas tienden a repetir los patrones de comportamiento, incluso cuando estos estándares son claramente dañinos? Esto puede variar desde relaciones tóxicas hasta hábitos autodestructivos, y todo lo que podamos imaginar.
La idea detrás de la repetición compulsiva es que de alguna manera estamos tratando de resolver o superar un trauma o conflictos no resueltos del pasado. Cada repetición es un intento de reescribir el guión, hacer las cosas de manera diferente, pero por alguna razón terminamos atrapados en el mismo ciclo.
Esta búsqueda para resolver el pasado a través de la repetición puede verse como una forma de buscar el control en situaciones que originalmente nos dejaron sin control. Es un mecanismo complejo que involucra tanto la vida como el impulso de la vida como el impulso de la muerte, porque mientras intentamos superar y vivir, también estamos, en cierto modo, buscando una forma de “muerte” a nuestro ser actual.
Implicaciones en la vida cotidiana
Ahora es posible que se pregunte cómo se aplican estos conceptos abstractos a su vida diaria. Bueno, la verdad es que están más presentes de lo que piensas. De esa relación no puede irse, incluso sabiendo que no es saludable, incluso ese hábito que intenta cambiar, pero termina repitiendo, todo está relacionado con el impulso de la muerte y la repetición compulsiva.
Comprender estos conceptos puede ser liberador. Reconocer que nuestros comportamientos autodestructivos o repetitivos pueden tener raíces más profundas que simplemente la falta de fuerza de voluntad pueden llevarnos a abordar estos problemas de manera diferente. En lugar de solo tratar de detener el comportamiento, podemos comenzar a explorar lo que está detrás de él, cuáles son los traumas o deseos no resueltos que nos llevan a repetir estos estándares.
Esto no significa que sea fácil. Trabajar con estas fuerzas profundas dentro de nosotros es un proceso desafiante y a menudo doloroso. Sin embargo, es un paso necesario hacia el crecimiento personal y para superar los ciclos autoestructivos que pueden arrestarnos durante años.
Entonces, la próxima vez que te atrapes repitiendo un patrón que no quieres, o te sientas atraído por algo que sabes que no es bueno para ti, recuerda que puede haber más en juego que una opción consciente. Puede ser una señal de que es hora de explorar más profundamente lo que está sucediendo dentro de usted, y tal vez, tal vez, encontrar un camino más allá de la repetición y el dolor.